El unico el incoparable... Clasico del Astillero... Demostrado y Carlos Victor Morales habla sobre esto...

CLASICO SOLO HAY UNO

Revisando el impresionante rating de sintonía que tuvo el superclásico, queda claro que el choque de los equipos más grandes y populares del país, es el partido cumbre de nuestro fútbol. Sin discusión, por más que por ahí se quieran inventar falsas idolatrías o endiosar a nivel nacional a quienes alcanzan relativos éxitos regionales. Cuando juegan Barcelona y Emelec el Ecuador se paraliza y se deja envolver por esa magia que sólo los Idolos del pueblo pueden generar. Hoy ganaron los amarillos y el lunes fue distinto en todos los rincones de la patria. Los periódicos vendieron más, las radios y la T.V. reventaron sintonía. Ecos del partido inmortal. Si hasta el goleador Escalada dejó Quito y se vino al Capwell, para vivir y sentir esas añoradas tardes cuando él era protagonista central de los superclásicos. O pregúntenle a Walter Ayoví, quien terminó de jugar por El Nacional a la 13h30 y se tomó el vuelo de las 14h30 y llegar puntual a la "Caldera". Eso es lo que despiertan amarillos y azules. Quienes vistieron estas camisetas saben lo que es jugar el super derby ecuatoriano. Un espectáculo incomparable en nuestro fútbol. Su encanto cautiva y apasiona. Lo sienten los jugadores, lo siente la gente, lo siente el país. Fue fiesta. Durante 90 minutos Ecuador se movió al ritmo del fútbol y se pintó con los colores de los Idolos.

Tomado de Diario Super

Autor: Carlos Víctor Morales

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