Roggiero sigue haciendo las cosas a la patada... Defensor del pueblo tomara medidas y Delgado habla sobre aquellos viejos tiempos y apela a la paz...

Bares ignoran a Roggiero

Los propietarios de bares y restaurantes aseguran que el pedido del presidente de Barcelona es inaplicable

Preparación. En los bares y restaurantes se están preparando para recibir a la gran cantidad de hinchas que prevén irán a observar el Clásico del Astillero en sus locales.

Mientras acomoda varias cajas de cerveza en el local de su propiedad, el portavoz y presidente de Ametcsa, (Asociación de Microempresarios Turísticos del Cerro Santa Ana), Manuel Vélez, se muestra sorprendido por el anuncio del presidente del club guayaquileño. Al conocer que Galo Roggiero quiere intervenir la señal de cable codificada para la difusión de partidos del equipo amarillo cuando juegue en Guayaquil, Vélez se muestra desconcertado. El directivo gremial sostiene que Roggiero debe concentrar sus esfuerzos en fortalecer la seguridad de las personas que asistan el domingo al Monumental.

Asegura que las “trifulcas” que se originan en esta clase de partidos son las que alejan a la gente del estadio, ya que “un padre de familia no va a arriesgar la integridad de sus hijos por nada ni nadie”. “Hoy (viernes) en la noche tengo una reunión con la directiva de la Asociación y aunque no está en el orden del día, mencionaré el asunto y tomaremos una postura ante el tema”, expresa. Aunque adelantó que se lo tomará como una simple manera de llamar la atención por parte de Roggiero, para que la fanaticada concurra masivamente al coloso del Salado.

“Con o sin señal codificada para negocios, ese estadio estará a reventar, habrá que alquilar balcones”. Agrega que él no puede obligar a las personas a ir a el estadio, pero tampoco impedir que vayan a los establecimientos, que como el suyo, son de tipo familiar y turístico. Estima que de las cincuenta y cinco personas que llenan su establecimiento, “treinta son familiares, el resto viene a tomarse una cerveza o gaseosa entre amigos y disfrutar tranquilamente del fútbol”, acota. En respuesta a las declaraciones que Roggiero diera a EXPRESO, Vélez indica que es verdad que los establecimientos no ayudan a pagar los sueldos de la plantilla de jugadores, pero al ver a Barcelona como una marca ellos indirectamente la promocionan, ya que el consumidor compra lo que ve “y si el equipo rinde en la cancha la gente volverá a los estadios”.

“El problema que tiene el equipo lo tiene que arreglar con la empresa a la que vendió sus derechos televisivos. Mire, acá los negocios de la asociación están afiliados a la Cámara de Turismo y compran la señal al proveedor de la misma, lo que uno gana alcanza para pagar impuestos municipales y poco más”, dice Manuel, quien se confiesa “barcelonista hasta los huesos”. El presidente de Barcelona señaló que se apoyará en la Policía Nacional para poder ejecutar esta acción. Esta situación se dificulta porque para el control del Clásico, se ha dispuesto que más de mil efectivos vayan al estadio. En la Intendencia de Policía no había, hasta ayer, ningún pedido de la dirigencia en ese sentido. Barcelona no había presentado ninguna denuncia formal.

>> Expediente

Defensor del Pueblo cita al directivo

La Defensoría del Pueblo actuará de hecho. A pesar de no tener ninguna denuncia al respecto, Claudio Mueckay decidió abrirle un expediente defensorial al presidente de Barcelona, Galo Roggiero Rolando.

El Defensor del Pueblo ha citado para el próximo martes a una audiencia al directivo torero y a los representantes de las empresas encargadas de facilitar el servicio PPV (pague por ver).

Mueckay confesó haberse enterado del tema por medio de la prensa. “Si la pretensión del señor Galo Roggiero lesiona los derechos a la comunicación o difusión de algún espectáculo sea cual fuere el mismo, tendrá que explicarme en qué basa su postura”, señaló el funcionario.

Anunció que confrontará el criterio del directivo apoyado en la Constitución ecuatoriana y con los Derechos Humanos Internacionales vigentes. “El deporte es un derecho de la humanidad y si su conducta es contraria a los mismos, emitiría una censura pública en su contra.

Advirtió además que no hay ninguna autoridad que pueda actuar “deprisa” para impedir la difusión del partido mañana, recordando que las mismas “deben actuar en función de la ley, y si lo hacen de manera precipitada, tendrán que responder ante el Defensor del Pueblo”.

>> Las añoranzas del astillero

Dos apasionados por los ídolos de Guayaquil

Educación. Jorge Delgado pide tranquilidad a los hinchas.

Jorge Delgado Guzmán vivió la fiesta del Clásico del Astillero desde tres frentes: como hincha, arquero y periodista.

La primera vez que vio el tradicional encuentro fue a fines de la década de los 40, en el viejo estadio Capwell que por ese entonces tenía gradas de madera.
Han pasado más de 60 años y muchas cosas han cambiado. La fiesta del fútbol se deterioró por motivos que Delgado tiene bien identificados.

“La violencia crece porque imitamos mucho a lo de afuera. Por la televisión vemos como en Argentina, Chile oInglaterra el hincha se convierte en enemigo de su propio equipo, porque con el pretexto de alentar sobrepasan el límite que hay entre el apoyo y el vandalismo”, comenta el ex arquero de Barcelona.

“Antes nos hacíamos bromas, pero nunca le faltamos el respeto al rival. Solo para poner un ejemplo le diré que a los estadios llegaban 100 policías, pero solo para controlar el tránsito, porque el hincha se sabía comportar. Hoy escuché que para el operativo del domingo irán cerca de 1.200 uniformados, porque vivimos bajo la sombra de la violencia”, acotó Delgado.

Una sonrisa se dibuja en su rostro al recordar “las galladas” con las que iba al Capwell, sin importar el color de la camiseta.
“Al que le gusta el fútbol, ese es mi amigo. Cuando perdía mi equipo (Barcelona) me dolía mucho, pero entre broma y broma se pasaba el trago amargo y cuando llegaba a la casa todo quedaba atrás. Hoy se debe andar con mucha precaución, porque no sabes en qué lugar te van a emboscar y todo por un partido”.

Delgado aconseja que en los colegios se retomen las clases de cívica y urbanidad, para que vuelva la calma al fútbol.

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