Mondaini es e Barcelona y ahora sabe lo ke se siente ser realmente grande...

La verdadera historia del ‘Diablo’

Marcos Mondaini está nuevamente en Ecuador, pero ahora preparado para jugar con los colores de Barcelona. Dejó Argentina la tarde del viernes y por la noche arribó a Guayaquil, donde el sábado fue presentado en la Noche Amarilla. EXPRESO te cuenta quién era el ‘Diablo’ antes de empezar su camino en Boca Juniors y de consagrarse en el Emelec.

Nacido el 14 de febrero de 1985 en Roque Sáenz Peña, provincia del Chaco, Marcos Gustavo Mondaini empezó un vínculo muy fuerte con la pelota en el mismo momento en que aprendió a caminar. “Era fútbol, fútbol y fútbol. Nada más”, cuenta Eduardo, el padre del delantero argentino.

Sus comienzos fueron en Estrella del Norte, un humilde club de

su barrio. Luego jugó en Azulgrana de Ampal, un equipo de una estación de combustible.

Sin embargo, su despegue se produjo en 1998 a los 13 años, cuando Sportivo Sáenz Peña, la institución más importante de su ciudad, lo convocó para participar en el Mundialito de Río Negro, un prestigioso torneo interprovincial.

Marquitos convirtió 15 goles y fue el goleador de esa competencia. Esa información llegó a Jorge Griffa, el descubridor de talentos más importante de la Argentina, quien en ese momento trabajaba en Boca.
Entonces Abel Almada, mano derecha de Griffa, recorrió los 1.100 kilómetros que hay entre Sáenz Peña y La Boca, y comprobó con sus propios ojos que lo que se decía de ese chico de piernas flaquitas era verdad.

“Cuando lo vimos, enseguida nos dimos cuenta de que era distinto”, cuenta Abel Almada, el enviado que mandó Boca hasta Sáenz Peña.

Inmediatamente, para exigirlo un poco más, el mismo Almada organizó un cuadrangular en Buenos Aires, en el que participó un equipo juvenil de Boca. Y Marquitos, jugando para su humilde club, lo rompió e hizo que los suyos ganaran el título.
“La final fue contra una formación de Boca. Él hizo el gol del empate 3-3 y luego ganaron por penales. El Tanque Rojas y Antonio Roma, las dos glorias xeneizes que observaron ese torneo, lo convocaron a Buenos Aires”, explica Eduardo Mondaini.

Finalmente, el 19 de enero de 1999, el joven Marcos tuvo que presentar en el complejo xeneize de Casa Amarilla el último examen, y al final de la jornada, entre más de 500 chicos, fue el único que fichó para Boca. Al principio, la distancia le costó. “Llegamos a Buenos Aires con casi nada. Me trajo mi viejo y me dejó en la pensión. Él no tenía ni dónde quedarse. Un tío mío lo llevó a su casa y me quedé solo. Dije, sorprendido por todo: ‘¿Qué estoy haciendo acá? Me quiero ir a mi casa’”. En ese entonces tenía 13 años y era apegado a su familia. “Me costaba mucho”, recuerda el hoy delantero de Barcelona. “Cuando hablaba por teléfono me ponía muy mal. Al principio, cada rato libre me lo pasaba tirado en la cama. Pero fueron pasando los días, los meses y me adapté a Boca, a Buenos Aires, y todo esto se hizo parte de mi vida”, relata Mondaini.
Admirador de Claudio Caniggia, Guillermo Barros Schelotto y ‘Titi’ Henry, se hizo fuerte en la distancia. Lo que siempre lo hizo seguir adelante fue el deseo de ayudar a su familia y de triunfar en Boca.

“Gracias a Dios, por el fútbol pude darles una mano. Eso me hace sentir orgulloso, por todo lo que hicieron por mí. Los pude ayudar a construir la casa que siempre soñaron. Verlos felices a ellos es mi felicidad”, dice.

Y después de su ciclo a préstamo en el Emelec, pensó que se le iba a cumplir su otro sueño. “Miguel Ángel Russo le dijo que lo iba a tener en cuenta, que iban a vender a Rodrigo Palacio y que él iba a ser el titular. Pero no le cumplió”, agrega Claudio Curti, representante del jugador.

Por esa promesa que le había hecho el anterior técnico de Boca, el ‘Diablo’ hasta dejó pasar una oferta de casi 3’000.000 de dólares del Olympiakos de Grecia, que le aseguraba el futuro. Finalmente, solo jugó cuatro partidos en un año.
Y ahora, después de esa mala experiencia, aceptó volver a Ecuador, el país que tan bien lo trató, pero con otra camiseta.

Fuente: Expreso

Marcos Mondaini se enfundó la amarilla

Le tomó tres semanas a la comisión de mercadeo organizar la ‘fiesta’ para los fanáticos barcelonistas. Hubo de todo, luces robóticas, juegos pirotécnicos, papel picado, cheerleaders, animadores como ‘El Cholito’ y hasta el invitado “sorpresa”: Marcos Mondaini, pero la homenajeada, la hinchada, no pudo ver al “equipo de los nueve millones” ganar.
Los seguidores canarios no le fallaron a la plantilla dirigida por Éver Hugo Almeida, pues aproximadamente 75.000 espectadores acudieron al estadio Monumental y aplaudieron a cada uno de los jugadores que salieron del camerino, para ser presentados sobre una plataforma, al más puro estilo del podio Champions League.

El último en salir fue

el ex delantero eléctrico. Cabizbajo y sonrojado, el futbolista de 22 años corrió hacia la tarima para unirse a sus nuevos compañeros. La hinchada lo ovacionó, y poco a poco levantó la mirada.
Recorrió con la vista el estadio, que estaba casi lleno, y ante las palabras de recibimiento del titular torero, Eduardo Maruri, pareció salir del lugar donde lo había llevado su mente.

“Marcos, bienvenido al mejor y más grande club del Ecuador. Gánate el corazón del Ídolo y demuestra que este equipo no es solo de nombres, sino de hombres. Barcelona ha vuelto”, gritó el asambleísta.
Inmediatamente la nueva canción del club, “Barcelona soy yo”, comenzó a sonar y fue coreada por los presentes, quienes ya conocían la letra.

Mondaini, quien vino en condición de préstamo por un año con opción a compra, como lo dio a conocer el presidente de la comisión de fútbol, Antonio Noboa, no jugó, pero sí estuvo en la banca de suplentes.
Sentado entre Carlos Hidalgo y Segundo Matamba, observó el partido a la espera de que Almeida le dé en los próximos días la posibilidad de debutar. “El lunes Mondaini comenzará a entrenar y va a tener la misma oportunidad de jugar que el resto”, dijo el técnico.
Fuente: Expreso

Mondaini fue bien recibido

Fue verdugo de Barcelona en la temporada 2006, cuando jugando por Emelec le hizo varios goles a los canarios en los Clásicos del Astillero; sin embargo, Marcos Mondaini fue bien recibido anoche por los hinchas de su nuevo club.

No fue el más aplaudido, ese honor fue para los argentinos Gastón Gato Sessa y Marcelo Chelo Delgado, pero en la presentación, donde fue el último futbolista en saltar al campo de juego, el gaucho Mondaini dejó atrás su pasado eléctrico.

El atacante no jugó, fue reservado para la Noche Amarilla en Machala, este miércoles.

El presidente barcelonista, Eduardo Maruri, en la tarima donde fue presentada la plantilla canaria tomó a Mondaini de un brazo

y lo mostró a la afición que hace dos campañas sufrió con sus goles.

“Bienvenido. Métete en el mejor equipo del país”, dijo Maruri a un Mondaini que parecía reflejar sorpresa en su rostro.

Luego, antes del inicio del juego, en la banca de suplentes el nuevo atacante torero indicó: “La dirigencia hizo un esfuerzo y por eso estoy acá. Quiero dar lo mejor de mí”, señaló.

Sobre la idea de que aterrizara en un helicóptero en la mitad de la cancha, Mondaini confirmó que la directiva tenía esa idea pero él se negó por su temor a esas aeronaves.
Fuente: El Universo

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